Los Curris: Brasil: ¡Sorpresa!


Los Curris

Cosas frikis por doquier

Brasil: ¡Sorpresa!

¿Por qué no escribo?

Para empezar he estado liadísimo con Real Life, un juego masivo multiplayer que últimamente me tiene muy enganchado. Estoy terminando una misión muy interesante.

La segunda razón por la que no he escrito es porque... hay tanto que decir! Me temo que el viaje a Brasil da para mucho más que un post.

Así que finalmente me he decidido a dividir mis experiencias en el otro lado del charco en varios posts.

Lamentablemente no voy a poder poner fotos porque me robaron la cámara de fotos (el cómo vendrá más adelante) pero ahí va la primera entrega. Grabé algunas cosas en vídeo, así que posiblemente un año de estos suba algo a youtube.

Hoy hablaré de las cosas que más me sorprendieron de Brasil (de ahí el título del post). Trataré de hacerlo por orden cronológico, excepto cuando no lo recuerde. Entonces escribiré siguiendo el orden que me venga en gana.

La selva: cuando dejamos de ver océano desde el avión empezamos a ver Brasil. Y era todo selva. Estuvimos unas 3 horas sobrevolando jungla, sin ver una sola edificación, desde 10000 metros de altura. Es algo casi imposible de imaginar para alguien acostumbrado a ver españa, todo sembrados y casitas.

Portugués: Mi compañero de viaje, Rafa, hablaba portugués, y yo no lo sabía. Excelente.

Río urbanísticamente: Una ensalada de montañas escarpadas con selva, playa y ciudad costera, todo mezclado en trozos grandes. Aderezado con sol por las mañanas y con lluvias tropicales a última hora de la tarde, todos los días (hay que llevarse paraguas o impermeables finos).

Típica imagen desde el corcovado. Google images.

Hemisferio sur: Fue mi primera vez en el hemisferio sur. Me esperaba pasar del invierno madrileño al verano tropical, pero el hecho de que siguiera anocheciendo a las 6 de la tarde me pilló desprevenido. Allí anochece temprano en verano (con lo que puedes empezar la juerga más pronto) y tarde en invierno (así que cuando sales de trabajar seguramente sea de día todavía).

Estratificación social: Se nota que en brasil la pirámide social es diferente de la nuestra. No es un "estado del bienestar"; casi no hay clase media, y esto se hace patente en cuanto paseas por un par de calles. A pesar de ser un país barato para nosotros, un iPod (600 reales) vale más que el sueldo mínimo (400 reales - sí es muy poco).

Trato a los turistas: El intento de "exprimir" al turista es casi constante, especialmente en tiempos de carnaval. Lo experimentamos nada más llegar a Río - al salir del aeropuerto un hombre nos intentó timar para que pilláramos un taxi mucho más caro que los taxis normales (amarillos). Y no fue la única vez. En más de una ocasión me sentí como una "bolsa de dinero con patas", sin duda la peor experiencia del viaje. Este tipo de actitud puede acabar siendo muy dañina para el turismo en el país, pero los brasileños parecen no darse cuenta - imagino que es una consecuencia directa de la escasa educación en general.

La seguridad: Nadie nos intentó asaltar, pero el hecho de tener que estar siempre pendientes de que no lo intentaran era muy cansado. Y justo cuando nos relajamos nos robaron la cámara de fotos (sin darnos cuenta; nos la quitaron de un bolsillo) lo cual hizo que nos pusiéramos tensos otra vez. Una lástima.

La comida: Muy buena, variada y barata. Aconsejo la feijoada en Río (NO en la Casa de la Feijoada, ahí os timan) y la Moqueca en Salvador. No comáis comida en los puestos de la calle.

Obrigado: La palabra que más usé. Negad con la cabeza y decidla cada vez que os quieran vender algo. No suelen insistir.

Pulgar: Es el gesto por excelencia en brasil es levantar el dedo pulgar en señal de victoria. Se usa incluso en lugar de la palabra "sí".

Un brasileño cualquiera diciendo que sí.

Culto al cuerpo:
Es totalmente cierto. Tanto en Río como en Salvador el culto al cuerpo es una religión... para los hombres al menos. Y esque los brasileños (los hombres brasileños) se cuidan mucho. No hay más que ir a una playa de Río para ver hombres con cuerpos esculturales ("tableta de chocolate" incluida), depilados, tatuados y con un colgantito molón. Por supuesto sin camiseta. Por otra parte, no me pareció que las mujeres fueran especialmente atractivas y desde luego no me pareció que se cuidaran demasiado (aparte de estar muy morenas y llevar tanguitas, lo cual no tiene mérito donde siempre es verano). Amigas heterosexuales y amigos homosexuales: Brasil es un destino que os recomiendo si queréis regocijaros con las vistas. Un regocijo que yo no podré compartir.



Ficción
Realidad

El olor: Río y Salvador "huelen". Supongo que Madrid también, pero estoy acostumbrado. Sería más correcto decir que "tienen un olor muy diferente al de madrid". Río huele como una criatura viva: una mezcla de selva húmeda (no precisamente de la variedad refrescante), alcantarillados antiguos, gente y mar. Salvador, al ser más seco y caluroso, tiene olores más fuertes. En el camino desde el aeropuerto olía a especias, y en las calles centrales del carnaval olía a "zumo de basura recalentado".

El carnaval: Es un evento nacional, que interesa en todo el país, al menos a juzgar por el contenido de todos los canales de televisión que pudimos ver. Aunque el resto del mundo conozca más el carnaval de río, el carnaval más popular en Brasil (el que sale en la tele) es el de Salvador de Bahía.

La música: Al menos en época de carnavales, me decepcionó bastante por lo repetitiva. Es requisito imprescindible que las canciones tengan un estribillo fácil (una de las que oímos tenía un estribillo que era "oi, oi. oi oi oi", no es coña). Aunque no vimos a Carlinhos Brown.

Ivete Sangalo: Cantante que yo desconocía pero que en Brasil es literalmente venerada por las masas. Para saber el tipo de música que le oí cantar, referirse al punto anterior.

Y hasta aquí puedo escribir hoy. Próximamente, lo que menos me gustó y lo que más.

Obrigado, obrigado.
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Blogger ZeRaTuL - jueves, febrero 21, 2008 5:45:00 p. m. (permalink)

Vaya decepción, no? con lo que prometía el viaje... en fin, espero que haya merecido la pena la experiencia, a pesar de resultar decepcionante en cierto modo...      



Anonymous Anónimo - lunes, febrero 25, 2008 3:20:00 p. m. (permalink)

COTA!!!! VISTE A XUXA!!!???? POR DIOS DIME QUE VISTES A XUXA!!!

Siento leer esas palabras sobre la escasez de mujeres expectaculares en playas brasileñas...

Capitan Castor!!